Anticípate a los potenciales problemas de la vida

Desde MA Psicólogos, especialistas en niños, adolescentes y adultos, vamos a abordar la importancia de prevenir y ser capaces de anticiparnos a potenciales problemas en nuestras vidas.

Está claro, que durante nuestras vidas surgen imprevistos y situaciones que no nos esperamos. Sin embargo, otras situaciones son previsibles, y a veces no actuamos ante ellas ya bien sea por desidia, falta de recursos de afrontamiento y valor o sencillamente falta de previsión. Un ejemplo claro: el coche comienza a dar problemas al arrancar y sabemos que su batería no está bien. Ante esta situación uno puede, aunque sea un fastidio (ya que es un contratiempo inesperado), ir al taller y así asegurarse no quedar sin batería con lo que conlleva, o no acudir al taller arriesgándose a lo que pueda suceder. Parece que no es un ejemplo muy ligado a la psicología, pero en cambio tiene mucho que ver. ¿Por qué? Pues evidentemente porque es un ejercicio de anticipación ante una potencial situación problemática, a la vez que una evaluación de nuestro valor de la responsabilidad y conocimiento de que los actos tienen consecuencias.

Nunca peques no falta de previsión

Anticipar y prevenir posibles situaciones indeseadas es un factor clave para desarrollar un adecuado control de las situaciones. Y como sabemos, tener control de la situación entraña menos sensación de incertidumbre, y con ello menor ansiedad. Así pues, lo que puede parecer una acción sin más, está afectando a más variables de nuestra vida de lo que creemos.

Y no sólo eso. ¿Cómo reaccionaríamos si por ejemplo nos quedásemos tirados en la carretera cuando tenemos que ir a trabajar? ¿O para irnos de viaje o cualquier otra situación? Está más que claro que nuestra frustración entraría en escena de forma más que evidente con lo que acarrea. Sentimientos como la ira, agresividad y pérdida de sensación de control podrían ser fácilmente protagonistas del momento. Un momento que podríamos haber previsto, anticipado y solucionado… pero que por nuestra falta de acción, motivación y actitud no sucedió.

Debemos revisar situaciones que a lo largo de nuestras vidas nos han hecho pasar por circunstancias similares, no con el objeto de martirizarnos, sino para aprender de los errores y no volver a cometerlos en el futuro. De esta manera estaremos progresando y sobre todo potenciando nuestro bienestar, ya que no pasaremos por situaciones de cierto estrés emocional que puedan conllevarnos problemas. Esos problemas además no sólo repercuten en nosotros, sino también en nuestro entorno más próximo, de forma que la mejora puede ser de varios niveles.

Anticiparnos supone un ejercicio de autoevaluación, de consciencia y de conocimiento acerca de nosotros mismos. Puede marcar la diferencia en muchas facetas de la vida, de modo que trabajar en esta variable puede ayudarnos  no sólo a ser más felices sino también a no estar expuestos a potenciales situaciones peligrosas. ¿Te atreves a trabajar en ello?

 

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