Desde MA Psicólogos especialistas tanto en psicología de adolescentes como en psicología de adultos vamos a abordar en este post la importancia del orden dentro de nuestras vidas. Y cuando decimos orden no nos estamos refiriendo a que los armarios estén organizados (que también es bueno) sino a tener cierto control y certidumbre dentro de nuestras vidas.
Cuando estamos en un punto en nuestras vidas en el que estamos algo desconcertados, cuando no tenemos muy claro lo que estamos haciendo o hacia donde nos dirigimos, es muy positivo poner algo de orden con el objetivo de que sea un punto de partida para crecer y abordar la realidad que nos viene.
¿Cómo hacerlo? Pues a través de sencillos pasos que nos ayudarán a cumplir con nuestras obligaciones diarias y que fomentarán el grado y capacidad de control de nuestro devenir diario.
- Primero de todo, ponte horarios. Tanto para irte a la cama como para despertar. Esto nos ayudará a que nuestro sueño sea más regular, descasemos mejor y podamos afrontar los días con más vitalidad.
- Haz listas con aquellas tareas que tengas que hacer. Planifica según el orden de importancia, urgencia y disponibilidad de tú día a día.
- Trata de cumplir con todo aquello que te hayas propuesto, ya que tu autoestima saldrá reforzada.
- Constrúyete un menú diario, sano y saludable y que se adapte a tus gustos y necesidades según el tipo de actividad que vayas a realizar. De paso tu bolsillo te lo agradecerá.
- Prémiate con actividades/cosas placenteras tras haber realizado lo que tenías planificado (un premio puede ir desde salir a correr, ver un capítulo de una serie hasta tomar un café con un amigo). El objetivo de todo esto es optimizar tu tiempo y que consigas tener más momentos libres cumpliendo a la vez con todas tus obligaciones.
- Un ejercicio extra es visualizar, una vez ya acostado a la hora de dormir, el día vivido y el día que te toca vivir mañana. A su vez otro buen ejercicio es visualizar el día o jornada que tienes por delante al despertarte.
En ocasiones creemos que nos falta tiempo para hacer cosas y lo que está ocurriendo en realidad es una mala organización. No te pongas excusas y saca mayor provecho del tiempo, conseguirás aquello que quieras si te lo propones.
La motivación cobra un papel fundamental en todo esto, así que fíjate objetivos realistas a corto plazo con el fin de poder disfrutar de los resultados obtenidos y darte a ti mismo ese feedback que nos ayuda a continuar adelante.
¿Te atreves a intentarlo?