Claves para poner en marcha la Navidad

Desde MA Psicólogos Oviedo, especialistas en terapia para niños, adolescentes y adultos, hoy os vamos a dar 3 claves para poner en marcha en esta época navideña.

La Navidad es una situación proclive para pasar buenos momentos en compañía de familiares y amigos, pero a la vez se dan ciertas circunstancias que hemos de gestionar de la mejor manera, puesto que nos exponemos socialmente.

Por eso queremos daros 3 pautas básicas para gestionar lo mejor posible distintas circunstancias que suelen darnos quebraderos de cabeza en estas fechas.

1- En las comidas y cenas, tanto de familia como de empresa, guardar las formas.

Son épocas donde hay más excesos de lo habitual, y esto puede llevarnos a comportamientos no deseados en ocasiones. Debemos recordar la importancia de tener el control de la situación (autocontrol), si bien podemos disfrutar y desinhibirnos del mismo modo pero con mesura.

No entrar en discusiones insanas que sabemos que todos los años nos desagradan es un buen propósito. Podemos hablar de cualquier tema sin dejarnos llevar por el lado emocional, sabiendo poner límites a tiempo para no lamentarnos. Se trata de tener reuniones donde celebremos y no lamentemos.

2- Los excesos alimenticios suelen conllevar arrepentimiento, debemos anticiparnos y tener un plan.

Todos sabemos que en estas fechas vamos a comer más de lo habitual y recomendado. Comidas extraordinarias, dulces navideños… No tenemos que renunciar a darnos un gusto de cuándo en cuándo, pero debemos gestionarnos para hacerlo de una forma razonable y sana. Si nos organizamos adecuadamente, veremos que las fechas señaladas no son tantas (Nochebuena, Navidad, Nochevieja…), de modo que es clave ser disciplinados el resto de días que tenemos en periodo vacacional o festivo. Es decir, si somos capaces de tener buenos hábitos (alimenticios, pero también a nivel de ejercicio y deporte) durante los “días ordinarios”, no pasará nada terrible por tener dos o tres días “extraordinarios”. Esto supone, medir nuestro consumo de turrón y dulces navideños en el día a día, poniéndonos límites razonables, ya que la tentadora “bandeja navideña” puede ir en nuestra contra, y no tienes sentido recurrir a dietas milagro después, ayunos…

Mejor hacerlo de formas sana y equilibrada.

3- Realizar una reflexión sobre el año que se termina para valorar lo conseguido y ver qué debemos proponernos y mejorar.

Suena a tópico, pero es necesaria una autoevaluación no sólo para ver cuáles son las metas no conseguidas o a mantener, sino para valorar nuestros logros (algo mucho menos común, pero muy necesario). Este análisis no tiene por qué realizarse excepcionalmente en esta época, pero sí que cerrar un año puede entenderse como el momento idóneo para fijar objetivos. Ver en qué hemos fallado de forma constructiva, no para machacarnos, entender cuáles han sido las claves de lo conseguido y no conseguido… Tener perspectiva para un análisis profundo que nos sirva verdaderamente.

No corren tiempos sencillos, pero seguro que desde nuestra posición individual podemos mejorar algunas cuestiones que desemboquen en mayor bienestar, tanto familiar como profesional y sobre todo emocionalmente.

Tres pautas sencillas de poner en marchas y que nos ayudan a disfrutar al máximo de los encuentros sociales de estas fechas.

Desde MA Psicólogos os deseamos felices fiestas.

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