Los pilares que afianzan nuestro ánimo

Desde MA Psicólogos Oviedo, especialistas en niños, adolescentes y adultos, vamos a hablar de los pilares que afianzan nuestro ánimo y que nos ayudan a afrontar la realidad de nuestro día a día y también los malos momentos.

Sin duda, en nuestras vidas, tenemos que enfrentarnos a un montón de cosas que para nada son fáciles. Esto, que por supuesto conlleva un gran esfuerzo emocional, no todas las personas lo afrontan de la misma manera.

¿Un esfuerzo emocional? ¿Por qué?

A parte de las diferencias interindividuales de personalidad y las circunstancias vividas, hay algo más. Y ese algo más va de la mano de ciertos hábitos que ayudan a “recargar pilas”, clave para enfrentarnos después a lo que venga.

Estos pilares tienen que ver, para empezar con la comunicación. Dicho de otro modo: hablar nos sana, nos ayuda a alcanzar el bienestar.

Es tan esencial en las personas, que hace no sólo que podamos expresarnos o desahogarnos, sino que es elemento fundamental de la socialización. Somos seres sociales, por más que nos guste por momentos estar solos. Y ese contacto ayuda y mucho para ver otros puntos de vista, sentirse escuchado o sencillamente distraerse y estar lejos de las preocupaciones cotidianas por un tiempo.

Así pues, tener contacto humano, sobre todo de índole positiva y ligada al entretenimiento, unido a esa expresión a través del habla, es algo a tener muy en cuenta si queremos que nuestro nivel de energía sea adecuado.

Otro pilar es el ejercicio físico o deporte. Somos uno, y ejercitar nuestro cuerpo no sólo tiene beneficios en el mismo, sino que también en nuestra mente. Tener esos momentos para dedicarnos a nosotros nos ayudará por un lado a vernos físicamente mejor, lo cual redundará en nuestra salud y autoestima, y por otro lado en tener sensaciones positivas a través de los más que conocidos beneficios mentales que conlleva.

Múltiples estudios concluyen en la potencia de dichos beneficios, y si prestamos atención al “después” de ejercicio, las sensaciones positivas hablan por sí mismas.

En esta misma línea viene el último pilar, relacionado con los hobbies. Dedicar una parte de nuestro tiempo a desarrollar actividades que nos satisfagan y nos ilusionen es algo elemental para una correcta salud mental. Siendo conscientes de la vorágine en la que vivimos, con los tiempos al límite, una correcta organización será de gran ayuda para poder disfrutar de nuestras aficiones. Tener ese tiempo para tocar el instrumento musical que nos apasiona, leer, jugar, etc. supone tener tiempo para nosotros. Tiempo que disfrutaremos estando inmersos en esa actividad.

Nuestro estado de ánimo es voluble, pero atendiendo a los pilares comentados: comunicación, deporte y hobbies, potenciaremos el bienestar y también podremos afrontar mejor nuestra realidad con todas sus características, positivas y negativas.

No se trata de pensar que todo depende de estos pilares, sino que si nos esforzamos en llevarlos a cabo, tendremos mejor predisposición y más fortaleza para enfrentarnos al resto de circunstancias que nos vengan.

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