Ejercicios para fortalecer nuestra voluntad y actitud

Desde MA Psicólogos Oviedo, especialistas en terapia para niños, adolescentes y adultos, hoy vamos a hablar de 2 ejercicios para fortalecer nuestra voluntad y actitud.

Muchas veces hablamos en nuestro entorno sobre nuestros anhelos y esperanzas, verbalizando a nuestros seres queridos lo que nos gustaría lograr. Y en ese sentido, suelen salir temas como un cambio laboral, encontrar pareja, un cambio físico, un mejor afrontamiento de los problemas… cuestiones complejas que siempre llevan detrás aspectos psicológicos para su ejecución. Pues bien, hoy vamos a hablar sobre dos factores a entrenar para mejorar nuestra voluntad y actitud y conseguir aquello que anhelamos.

Evidentemente debemos partir de un objetivo, una meta a lograr. Es a partir de ésta cuando tiene sentido ver cómo potenciar nuestra mentalidad al respecto. En primer lugar hablaremos de la exposición voluntaria a situaciones difíciles en nuestra vida cotidiana. Esto no quiere decir estar constantemente poniéndonos a prueba. Quiere decir exponernos a situaciones incómodas de forma razonable con el objetivo de fortalecernos, a sabiendas de los beneficios de esta estrategia. Nos ocurre cuando hacemos deporte por ejemplo, ya que no sería necesaria la exposición al cansancio, o no mirar el teléfono durante un tiempo al día, o tratar un tema incómodo con nuestros seres queridos… Supone autoimponernos una disciplina elegida, que fortalecerá nuestro control de la situación porque somos nosotros los que elegimos, eliminando la evitación y aumentando nuestra tolerancia a la frustración.

En un principio puede que parezca tener poco sentido, pero nuestra voluntad se ejercitará, potenciándose y haciéndonos mucho más fuertes a nivel mental. No nos esconderemos ante lo desagradable, lo afrontaremos.

El segundo ejercicio tiene que ver con la renuncia a la satisfacción inmediata de algunas acciones. Volvemos a la idea de no llevarlo al extremo, pero consiste en ser capaces de rechazar “placeres” inmediatos a sabiendas de sus consecuencias en el largo plazo. No nos sentiremos tan bien en el momento, sino que el disfrute tendrá lugar de forma más tardía, siendo la recompensa más potente. Es una decisión consciente. No caeremos en las tentaciones, ya que estaremos siendo disciplinados. Y esto ocurre cuando no fumamos un cigarrillo si estamos dejando el tabaco, cuando no comemos un pastel si estamos a dieta, etc. Suena a algo muy sencillo, pero vivimos en la era de lo inmediato, donde todo está a golpe de click. Lo queremos todo ya. Y por supuesto, muchas de las cosas difíciles y complejas de la vida no se consiguen de un minuto para otro, ni en un día, o semana…

Como vemos nuestra actitud y voluntad están íntimamente relacionadas con la consecución de objetivos complejos. Parece sencillo, pero posiblemente sea lo que marque la diferencia entre las personas que se proponen algo y lo consiguen y los que no. No es un secreto a voces, pero actualmente tenemos suficientes distracciones y potenciales recompensas inmediatas como para sentirnos “a prueba” muy a menudo.

¿Te atreves a poner en marcha estos dos ejercicios?

Orientación gratuita
Este servicio se ofrece para orientar a aquellas personas que dudan tener o no un problema psicológico. Aclara tus dudas y decide si necesitas recibir atención psicológica.



    Llámanos ahora: 984 10 63 41 / 672 22 86 86
    Deja un comentario